lunes

De nuevo allí....

 
 
 
 
 
 
 
 
  
En la Puerta del Sol con la misma pancarta tipo bocata.
 
 
 
 
 
No estuve mucho tiempo. Unas cosas me gustan y otras no
 
-Me gusta la ilusión que sigue intacta. La cara de la gente que repite que no nos representan. Las ganas de que algo pueda cambiar evitando el desaliento.
 
-No me gustan los niños en las manifestaciones. No me gustan. Puede que esté equivocada al pensar que se les manipula también con su presencia. No entienden casi nada. Aparte del peligro de que la poli ataque.
 
Había un niño pequeño, no más de siete años, con un gorro y una pancarta que ponía:
" Iros todos a la mierda"
La gente le hacía fotos, alucinadas por la claridad de su pancarta
 
Como soy muy curiosa pregunté:
- ¿Quién debe irse a la mierda, pequeñajo?
 
- Los del Con- Consegro y los del museo del Prado
 
Mientras sus padres me miraban, recogí la pancarta, me la guardé en la bolsa y me fui dando un paseo hasta mi casa.
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

6 comentarios:

  1. A veces dudo si los niños, así, en genérico, existen. Existe la niñez, que es una forma de ser muy poco condicionada, casi feliz, y aunque coincide a menudo en una edad temprana, hay personas que muestran destellos de ella hasta el mismo día de su muerte a los noventa y siete años.

    En lo referente a las manifestaciones, aunque necesarias, corren desde siempre el enorme riesgo de ser manipuladas, o lo que es peor, de ser "asimiladas" por la enorme boca de ese animal insaciable que nos acosa. A menudo, de una acción justa y necesaria a una camiseta serigrafiada en la que se luce y resume toda nuestra implicación va un paso. Esos riesgos sin duda se multiplican por cien cuando los implicados son "personas de poca edad".

    Un beso.

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  2. La verdad es que tampoco yo lo habría hecho. Pero, es curioso, acudí con mi cámara a la manifestación de la minería del carbón ante el Ministerio de Industria. La imagen que más me impactó fue la de una madre joven que llevaba su bebé pegado al cuerpo y un paraguas en la mano para protegerlo del sol y que pasó por delante de mí, pocos minutos antes de que se armara la marimorena. Supongo que ni siquiera debió pasarle por la imaginación la posibilidad de estar arrostrando más peligro que el de una insolación y para evitarlo, se había protegido. La foto salió algo quemada pero es alucinante.

    Un abrazo. Franzisska

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  3. No creo que sea una buena idea llevar a los niños a estas cosas, no es edad para entender nada, es edad de jugar y de aprender ¡eso si no recortan más en cultura!. Los padres sí tienen su mérito, porque acudir a una manifestación con la prole es echarle valor por partida doble.

    Muchos besitos, guapa y "merci" por las estrellitas :)

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  4. Nunca llueve al gusto de todos, ni tu presencia daba legitimidad al niño, a la pancarta y a los descerebrados de sus padres.
    Imagina por un momento que todos los que piensan como tu se retiraran. Indudablemente el movimiento se lo apropiaría esa gente.

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  5. He llevado mi hija pequena al cine. Durmio. Nunca he llevado mi hija a una manifestacion. Ella estuvo presente en una manif reciente, en la Plaza del Museo (donde esta el Museo Van Gogh), defendiendo los sin papeles.

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  6. Muchas gracias a todos.

    Perdonad. Os tengo que invitar

    Besos

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