viernes

Por lo menos, 15 años más...

La semana pasada, en la terraza de una cafetería, un amigo y yo fuimos testigos de la conversación. Debo reconocer que su cálida voz y su seguridad me conmovieron.


- Elisa, no te pongas al sol, a nuestra edad ese sol no es bueno
- Necesito el sol para mis huesos, la vitamina D me viene bien
- Como pilles una gripe te puede llevar al cementerio, ponte el gorro por lo menos
- Ah, no. Ni una gripe, ni nada me va a llevar al cementerio. Necesito quince años por lo menos y a ser posible, algunos más y en perfectas condiciones. Ya sabes el acuerdo que tenemos Dios y yo, respecto a mi nieto 
- Vaya perra tienes con ese asunto
- Y con razón. No sería justo que Miguelín creciera sin mi. Echa cuentas, si ahora tiene doce años, si está sin padres y sin su hermana desde los siete, si solamente nos tenemos los dos, si soy su padre, su madre, su hermana. Si soy la que le enseña que es bonito vivir, soñar y crecer. Si soy la que le lleva de viaje en navidades para que no esté por aquí esos días tan amargos ¿Sería justo que yo muriera o enfermara gravemente?  ¿Qué vida le esperaría a mi niño? Sería carne de cañón y no. Bastante ha sufrido para su poca edad. Tengo que verle crecer y que sea muy feliz. Quiero ver en él un hombre preparado y culto. Un hombre de provecho. Quiero verle enamorado hasta el tuétano y que le hagan feliz y si me da el tiempo, conocer a algunos de los frutos de ese amor, es decir, un bisnieto o bisnieta que en cuestión del sexo no soy exigente
- No podemos elegir la hora, cuando llegue, llegará, te pongas como te pongas.
- A vosotras sí, que no estáis en mi situación. Por eso he llegado a un acuerdo con Dios.
- ¿Ha aceptado? No me digas que te ha contestado, eso sería un síntoma de, bueno ya sabes de qué
- No me ha contestado, pero seguro que le ha llegado mi recado. Si algo me sucediera le odiaré tanto como le quiero ahora. Iré toda la eternidad tras él gritando cosas tan feas y tan desagradables que por no oírme  me va satisfacer. No le queda otra.

 Nos entraron ganas de decir que sí, que le haría caso...

* La foto es de internet

2 comentarios:

  1. Quiero pensar que sí, que Dios ha aceptado el trato, porque no es justo que alguien sufra tanto, el chico se lo merece y por supuesto ella también. Claro que teniendo en cuenta que existen muchas injusticias en el mundo... ¡no quiero ni pensarlo!
    Un besito.

    ResponderEliminar
  2. ¡Qué bonito! Yo también aseguraría que sí, que podrá realizar su deseo, y no por dios, sino por su propia firmeza.
    Abrazos.

    ResponderEliminar

Archivo del blog